La directiva de la UE en relación con la divulgación de información no financiera tiene como objetivo aumentar la pertinencia, la coherencia y la comparabilidad de la información social y ambiental divulgada por las grandes empresas europeas. Para ello, las empresas tienen que incluir en su informe de gestión anual un estado de información no financiera en el que se describen las políticas, los resultados y los riesgos ASG pertinentes con su actividad económica. Para facilitar la divulgación de esta información, la Comisión Europea preparó directrices no vinculantes generales (2017) y sobre la información climática (2019). Los Estados miembros deben poder exigir la verificación de la información contenida en los EINF por parte de un prestador de servicios de verificación.